3 Capítulo 3: La estructura de las palabras
Objetivos
En este capítulo se presentan los conceptos asociados con la formación de las palabras. El estudiante aprenderá sobre los siguientes temas:
- los procedimientos en la creación de palabras en una lengua
- los elementos básicos en la estructura y formación de las palabras
- la formación de palabras más complejas usando prefijos y sufijos
- el análisis de palabras compuestas
- el significado de las palabras a base de las unidades mínimas de significado que las forman
3.1 ¿Qué es una palabra?
La Real Academia Española (RAE) define una palabra como ‘una unidad lingüística, dotada generalmente de significado, que se separa de las demás mediante pausas potenciales en la pronunciación y blancos en la escritura’ (DLE, s.v.). Dependiendo del tipo de información que comunican, las palabras pertenecen a dos categorías o clases distintivas: léxicas o funcionales. Las palabras léxicas comunican un significado definido como casa, bonito, sonrío o rápido y pueden oficiar como sustantivos, verbos, adjetivos y adverbios (véase capítulo 4 para más información sobre las categorías gramaticales). La categoría de palabras léxicas es potencialmente infinita, ya que se expande continuamente cuando se realizan nuevos descubrimientos científicos, se desarrollan nuevos productos y se exploran nuevas ideas como internet, mensajear, googlear[1](a veces escrito como guglear) o tuit. Todos los años, la RAE publica modificaciones en las reglas gramaticales y ortográficas, igual que una lista de nuevas aportaciones léxicas a la lengua. Por ejemplo, en noviembre de 2019, la RAE introdujo nuevas palabras al diccionario como beatlemanía, ‘una afición acusada por la música y la estética de los Beatles’; brunch, ‘la comida que se toma a media mañana en sustitución del desayuno y de la comida de mediodía’; cumplemés, ‘día en que se cumple un mes de algún hecho, especialmente del nacimiento de un niño’, y amá, una palabra popular que significa ‘madre’ en el País Vasco, Guatemala, Honduras, México y Venezuela (National Geographic en Español 2019). Las palabras léxicas pertenecen a una categoría abierta. Esto implica que se pueden crear o agregar nuevas palabras a la lengua si es necesario.
A diferencia de las palabras léxicas, las palabras funcionales comunican información gramatical; entre ellas figuran los determinantes (p. ej. el libro, esta casa, nuestro coche), las preposiciones (p. ej. ante, con, de, en, para y por) y las conjunciones (p. ej. y/e, o/u, mas, pero y sino). Las palabras funcionales, o gramaticales, pertenecen a una categoría cerrada, es decir, una categoría a la que no se introducen nuevas palabras y que se ha mantenido inalterable a través de los años. ¿Cuándo fue la última vez en que Ud. oyó una nueva preposición o conjunción?
Las lenguas siempre cambian y se adaptan para satisfacer las necesidades de quienes las hablan. Si las lenguas no hubieran evolucionado, no tendríamos palabras para referirnos a nuevas ideas, conceptos y cosas, como el audiolibro, clicar y su variante, cliquear, escanear o módem. ¿Puede Ud. pensar en otras palabras parecidas?
A continuación se discutirán los procesos utilizados para crear, adoptar e implementar nuevas palabras en una lengua, tal como han sido identificados por los lingüistas.
¿Sabía Ud. que…?
El lenguage inclusivo
Los pronombres personales en español siempre se habían considerado como parte de una categoría cerrada de palabras. Sin embargo, algunos grupos que promueven el uso del lenguaje inclusivo han propuesto nuevas formas pronominales como elle, ell@s, ellxs para evitar la asignación de género binario a las personas o a grupos. El lenguaje no sexista o inclusivo surgió para evitar el prejuicio hacia un sexo o género social en particular. En español, esto incluye el uso de palabras que no son específicas de género para referirse a roles o profesiones, la formación de frases de manera equivalente y la interrupción del uso generalizado de términos masculinos, mayormente para las palabras que terminan en –o o –a. Según la RAE, “[e]l pronombre elle es un recurso creado y promovido en determinados ámbitos para aludir a quienes puedan no sentirse identificados con ninguno de los dos géneros tradicionalmente existentes. Su uso no está generalizado ni asentado”. Después de mucha consideración, la RAE decidió eliminar el pronombre no binario elle de su Diccionario de la lengua española (DLE) y solamente lo incluye como el nombre del dígrafo ll del abecedario.
3.2 Unidades mínimas significativas
En español, cada palabra tiene una unidad mínima de significado que transmite información. Algunas palabras constan de una sola unidad mínima significativa, como entonces, mujer o papel. Otras palabras consisten en varias unidades mínimas significativas relacionadas etimológica y morfológicamente, como gato, gata y gatitas. Es fácil reconocer cuando una palabra se relaciona con otra por la sola observación de elementos similares en su construcción y significado, tal como en el caso de gato, gata y gatitas. Siempre y cuando un hispanohablante oye una palabra que contiene gat- inmediatamente la relaciona con el concepto de un animal felino doméstico que muchos de nosotros tenemos como mascotas. Si comparamos la palabra gato con gata, la única diferencia entre estas dos palabras es la letra final –o y –a, que indican género masculino y femenino, respectivamente.
Ahora bien, si comparamos la palabra gata con gatita, se puede aislar otro elemento o unidad mínima de significado, -it-, que distingue estas dos palabras. En español se usa la unidad mínima significativa -it- como diminutivo, mayormente para dar un matiz de tamaño pequeño. El elemento -it- en la palabra gatita es el mismo que se encuentra en las palabras agüita, casita y papelito. Además de comunicar la idea de tamaño pequeño, el elemento -it- en español también se usa como una expresión de cariño o afecto, como en las palabras amiguita, cielito, mamita o papito.
Cuando comparamos y contrastamos las palabras en una lengua, podemos identificar las partes más pequeñas que comunican un significado importante. Si comprendemos estas partes y cómo se relacionan entre sí, podemos entender cómo se construyen las palabras en la lengua. Este conocimiento también nos ayuda a entender palabras más complejas y cómo se derivan y flexionan. Al aprender sobre estas partes significativas, podemos ver conexiones entre palabras y su ortografía, lo que hace que la ortografía práctica parezca menos arbitraria. En fin, aprender sobre la estructura y el origen de las palabras puede ayudarnos a mejorar nuestro vocabulario, la comprensión de la relación o parentesco entre las palabras y su ortografía. Esto se hace posible gracias al estudio de la morfología.
3.3 La morfología
La morfología es una rama de la lingüística que estudia la estructura de las palabras. Además de estudiar la estructura interna de las palabras y de los elementos que las componen, también se ocupa de los procedimientos involucrados en la creación y formación de nuevas palabras. El término morfología viene de la palabra griega morphe, que significa ‘forma’, y logos, ‘estudio’. Por lo tanto, la morfología es el estudio de la forma de las palabras (Azevedo 2009; Hualde et al. 2021).
En la morfología, el morfema es una unidad mínima de significado que se encuentra en una palabra (Azevedo 2009; Hualde et al. 2021; Wheatley 2005). Cada palabra tiene una raíz o lexema que nos comunica la esencia o el significado de la palabra. Hay palabras que tienen una sola unidad de significado, o sea, un morfema, como lápiz, pan o papel mientras que hay otras que constan de varias unidades significativas como casa, casas, casita, casota, casero y casucha. Tal como se puede observar, cada una de estas susodichas palabras tiene la misma raíz o lexema, cas-. Por consiguiente, cuando se ve o se oye una palabra que contenga el morfema cas-, en un principio da a entender que se refiere a una construcción cubierta destinada a ser habitada. La palabra casa viene del latín casam (acusativo de casa[2]) que significa ‘choza’ o ‘cabaña’ ya que las primeras casas eran tiendas de campaña que se hacían de estacas y ramas. A veces la relación etimológica entre palabras no es tan evidente. Por ejemplo, la palabra casino en español tiene el mismo origen latino que la palabra casa, siendo diminutivo de origen italiano que quería decir ‘casa de campo señorial’ (DLE, s.v.), pero no son palabras relacionadas en el español porque casino es un préstamo (véase sección 3.4.1). A diferencia de la palabra casino, las palabras casar, casamiento y casado comparten la misma raíz española que la palabra casa; todas se relacionan con el concepto de compartir un domicilio o crear un hogar. Nótese que no todas las palabras en español que empiezan con cas- se relacionan etimológicamente. Hay otro verbo casar que significa ‘anular’. A diferencia del verbo casarse, el verbo casar viene del latín cassāre que significa ‘dejar nulo’ o ‘anulación’. En la morfología, cuando se analizan y se aíslan morfemas en las palabras, es importante no solamente considerar las formas, la manera en que se escriben o se pronuncian, sino también hay que considerar el significado detrás de estas unidades mínimas significativas y de ahí se puede determinar si hay una relación etimológica entre estas formas o no.
Debido a cómo funciona el lenguaje, cualquier combinación de morfemas estará en una secuencia lineal. Los lexemas pueden ser modificados por afijos que son morfemas añadidos a la raíz, que pueden cambiar el significado de la palabra. Estos afijos pueden ser prefijos, los que van antes de la raíz, o sufijos, los que van después de la raíz. Por ejemplo, la palabra desesperanza está compuesta por la raíz esper– a la que se le agregan el prefijo des– y los sufijos -anz- y –a. Al agregar estos afijos, se modifica el significado de la raíz o del lexema. La figura 3.6 muestra la estructura básica de la palabra desesperanza, indicando la raíz y los afijos. (Para más información sobre los prefijos y sufijos, véase capítulo 2.)
Luego se estudiarán en más detalle los afijos, prefijos y sufijos en las secciones 3.5 y 3.6 abajo, pero ahora pasamos a considerar cómo se crean nuevas palabras en la lengua.
3.4 Ampliación del léxico: procedimientos externos e internos
Hay dos procesos principales en la ampliación del léxico de una lengua: los procedimientos externos e internos.
3.4.1 Procedimientos externos
Hay varios factores que motivan la creación de nuevas palabras en una lengua. El primero se trata de la incorporación de palabras mediante procedimientos externos a la lengua, mayormente la aportación de préstamos que una lengua toma de otra. Los préstamos constan de palabras o expresiones de una lengua que son adoptadas a una lengua receptora (véanse también capítulos 1 y 6). La adopción de préstamos ha enriquecido todas las lenguas a lo largo de la historia. Cuando dos o más lenguas están en contacto o coexisten, se influyen mutuamente y se pueden encontrar préstamos en ambas lenguas. En inglés, por ejemplo, encontramos préstamos del español como burrito, rodeo, siesta y taco. Asimismo, el español cuenta con varias palabras adaptadas del inglés como cool, lobby, lonche, mánager (pronunciado [má.na.ʤer] parecido a la pronunciación inglesa) y troca. A pesar de la recomendación de la Real Academia Española (DPD) de evitar el uso innecesario de extranjerismos, su utilización resulta inevitable en una sociedad globalizada.
Hay varios tipos de préstamos de una lengua a otra:
- Extranjerismos no adaptados y xenismos
- Extranjerismos adaptados
- Calcos
Los extranjerismos no adaptados consisten en palabras adoptadas de una lengua extranjera que no han sufrido cambios fonológicos, morfológicos u ortográficos del español. Algunos ejemplos son pizza (pronunciado [pí.sa], [pít.sa] o [pík.sa], según el dialecto), club, hot dog, rock, punk y parking, entre otros. Los xenismos son otro tipo de extranjerismo no adaptado que hacen referencia a una realidad ajena a la lengua y a la comunidad receptora que es incapaz de encontrar un equivalente, por ejemplo, ayatolá, burka, lord, samurái, sari, sir, talibán, troika y yihad. Tal como se ve en el tuit en la figura 3.7, la RAE afirma que “los extranjerismos… se pronuncian aproximadamente como les corresponde en su lengua originaria” a no ser que sea un extranjerismo adaptado, el tipo de extranjerismo que se discute a continuación.
Los extranjerismos adaptados son palabras de otros idiomas que se adoptan a la lengua transformándose de tal manera para reflejar el sistema fonológico, morfológico y ortográfico del español. Algunos ejemplos son aparcamiento, béisbol, bistec, esmog y tenis. Otros ejemplos incluyen baipás, champán, champú, espaguetis, fútbol y jonrón.
El último tipo de préstamos son los calcos. Los calcos léxicos son préstamos lingüísticos que se producen cuando una palabra o una expresión de una lengua extranjera se traduce literalmente al idioma receptor, adoptando así la estructura y forma original de la lengua de origen. Estas construcciones pueden resultar en frases o términos que, si bien pueden entenderse, pueden sonar extraños o poco naturales para los hablantes nativos del idioma receptor. Algunos ejemplos de calcos léxicos en español son jardín de niños de kindergarten, banco de datos de databank, hora feliz de happy hour, luna de miel de honeymoon, rascacielos de skyscraper, fin de semana de weekend, entre otros. (Para los calcos semánticos, véase el capítulo 6.)
3.4.2 Procedimientos internos
El segundo procedimiento en la ampliación del léxico en una lengua tiene que ver con procedimientos internos que consisten en cambios morfológicos de la propia lengua —mayormente la formación de palabras nuevas usando una palabra o lexema ya existente y añadiéndole partículas que comunican información gramatical o léxica—, por ejemplo, libr-o, libr-erí-a o libr-it-o.
Hay varios procedimientos internos involucrados en la creación de nuevas palabras en la lengua. Yule (2020) describe algunos de ellos, los cuales se comentan a continuación.
3.4.2.1 Flexión
La flexión es la unión de morfemas flexivos, siempre sufijos, a un lexema sin cambiar la categoría gramatical. Por ejemplo, la palabra rojo consta del lexema roj- y tiene cuatro formas diferentes: rojo, roja, rojos y rojas. A pesar de los cambios flexivos, todas estas formas siguen siendo adjetivos. Las formas verbales en español también sufren cambios morfológicos en la conjugación en la que se le añaden morfemas flexivos a la raíz como compro, compraba, compré, compraré y compraría. Para más información sobre la flexión, véase sección 3.9.2 a continuación.
3.4.2.2 Derivación
La derivación consta de la unión de morfemas derivativos al lexema. A diferencia de la flexión, la derivación puede incurrir cambios a la categoría gramatical. Por ejemplo, canción (sustantivo), canto (verbo o sustantivo), cancionero (sustantivo), cantante (sustantivo), cantarín (sustantivo), cantable o cantado (adjetivos). Para más información sobre la derivación, véase sección 3.9.2 a continuación.
3.4.2.3 Composición
La composición es un procedimiento morfológico que consiste en la unión de dos o más lexemas para formar una nueva palabra con un concepto propio, específico y nuevo. Por ejemplo, la palabra girasol está formada de la forma verbal gira (del verbo girar) y el sustantivo sol, que nos hace imaginar algo que da vuelta o gira alrededor del sol, la estrella luminosa del sistema planetario. Sin embargo, el girasol se refiere a una ‘planta herbácea de tallo largo cuyas flores grandes, redondas y amarillas miran el sol’.
En su Nueva gramática de la lengua española (NGLE), la RAE clasifica las palabras compuestas según la integración de sus constituyentes: compuestos léxicos o propios, compuestos sintagmáticos y compuestos sintácticos. Los compuestos léxicos o propios se forman por una sola palabra ortográfica, sin espacios ni guiones, y con un acento prosódico, por ejemplo, altavoz, bienvenido, centroamericano, correcaminos, maldecir y sacapuntas, entre otros. Por otro lado, los compuestos sintagmáticos son constituyentes independientes en cuanto a su representación ortográfica y prosódica, como año nuevo, azul marino, medio ambiente, pavo real y tren bala, por citar algunos; a veces se separan las palabras con guion intermedio como en polaco-alemán, político-económico, segunda-generación, teórico-práctico, etc. El tercer caso, los compuestos sintácticos, es tratado como locuciones de tipo nominal como, por ejemplo, café con leche, hombre de negocios y ojo de huracán (cfr. Díaz Campos et al. 2018:132-135).
Según la composición de las categorías gramaticales de las palabras, podemos considerar las combinaciones presentadas en la tabla 3.1.
Categorías gramaticales | Ejemplos |
---|---|
sustantivo + sustantivo | balompié
Centroamérica coliflor videojuego |
sustantivo + adjetivo | caradura
hierbabuena maniatado norteamericano |
sustantivo + preposición + sustantivo | café con leche
hombre de negocios ojo de huracán tarjeta de crédito |
adjetivo + adjetivo | agridulce
azul marino francoalemán sordomudo |
adjetivo + sustantivo | altavoz
hispanohablante librecambio mediodía |
verbo + sustantivo | espantapájaros
matasanos metepatas trabalenguas |
verbo + verbo | duermevela
ganapierde subibaja vaivén |
adverbio + sustantivo | malhumor
malnutrición |
adverbio + adjetivo | bienamado
malcriado malaconsejado |
adverbio + verbo | bienestar
maldecir malgastar |
Asimismo, hay posibilidad de combinar más de dos elementos para crear palabras compuestas en español, como correveidile (corre + ve + y + di + le), enhorabuena (en + hora + buena), metomentodo (meto + me + en + todo), sabelotodo (sabe + lo + todo), trágame tierra (traga + me + tierra), etc.
3.4.2.4 Acortamiento o truncamiento
El acortamiento o truncamiento es un proceso en el que se acortan las palabras eliminando sílabas, por ejemplo, bici por bicicleta, cole por colegio, insti por instituto, moto por motocicleta, pelu por peluquería, profe por profesor, tele por televisión y teso por tesoro. Nótese que la forma corta mantiene el género de la palabra original, así que las palabras truncadas, bici, foto, moto y tele son palabras femeninas y, por consiguiente, se dice la bici, la foto, la moto y la tele, respectivamente.
3.4.2.5 Eponimia y epónimos propietarios
La eponimia consiste en crear una palabra a partir de otro nombre, como el caso de la enfermedad de Alzheimer, que lleva el nombre del doctor Alois Alzheimer. En ocasiones, el nombre comercial o la marca registrada de un producto puede convertirse en un término genérico ampliamente utilizado para referirse al producto o servicio en general, a pesar de ir en contra de la intención original del dueño de la marca. Este fenónmeno de los epónimos propietarios suele ocurrir cuando el producto o servicio alcanza una gran popularidad o relevancia en el mercado. Algunos ejemplos ilustrativos son: bic (España y otros países) para cualquier bolígrafo o pluma desechable, chocomilk (México) como sinónimo de leche con chocolate, colacao (España) para referirse a una bebida similar, chupa chups (España y otros países) para cualquier caramelo con palo o paleta, coca-cola (España) como expresión para cualquier refresco de cola, danone (España y otros países) para referirse a los yogures, fanta (España y otros países) para cualquier refresco de naranja, nocilla (España) como término común para la crema de cacao con avellanas, papel albal (España) para designar el papel de aluminio, petite suisse (España y otros países) usado para denominar a ciertos yogures. ¿Puede Ud. pensar en más epónimos propietarios que no se han nombrado aquí?
3.4.2.6 Siglación y siglas
A veces se crean palabras nuevas combinando las letras iniciales de frases más largas. Este proceso se llama la siglación. Algunos ejemplos de siglas en español son la ONU (Organización de Naciones Unidas), la OTAN (Organización del Tratado Atlántico Norte), un OVNI (objeto volador no identificado) y el SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida). Otros ejemplos incluyen la RAE (Real Academia Española), la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México) y USA (pronúnciese [ú.sa]), por las siglas de United States of America. A veces las siglas pueden leerse con naturalidad, como los ejemplos que se acaban de citar, pero en otros casos no (RAE 2010:577-579). Por ejemplo, la sigla BCE de Banco Central Europeo tiene que leerse deletreando [bé.sé.é], o [bé.θé.é] en castellano, cada una de sus siglas.
3.4.2.7 Acronimia
La acronimia es un procedimiento de creación de palabras que abarca dos patrones distintos. En el primero, se crea un vocablo formado por la unión de elementos de dos o más palabras, constituido por el principio de la primera y el final de la última, como ofimática de oficina y informática (DLE, s.v. acrónimo). Otros ejemplos son informática de información y automática, y metrobús[3] de metrópolis y ómnibus.
La segunda manera de crear un acrónimo consiste en la combinación de letras iniciales de palabras con una configuración que permite su pronunciación como una sola voz. En otras palabras, estos acrónimos representan un tipo especial de sigla. En la sección 3.4.2.6, los ejemplos ONU, OTAN, RAE, UNAM son siglas y también acrónimos porque se pueden leer con naturalidad. La sigla BCE es solo sigla y no acrónimo. Los acrónimos son ampliamente utilizados en diversas industrias, como el comercio, por ejemplo, Bancomer (Banco de Comercio), y en organizaciones regionales, como el Mercosur (Mercado Común del Sur). Algunos ejemplos del mundo de las ciencias incluyen sonar, de sound navigation and ranging ‘navegación y localización por sonido’, además de láser de light amplification by stimulated emission of radiation ‘amplificación de luz por emisión estimulada de radiación’. Como se ve por estos últimos ejemplos, a veces las siglas y los acrónimos se representan por letras minúsculas cuando se trata de palabras que se han incorporado al léxico común (Muñoz-Basols et al. 2017:139).
3.4.2.8 Onomatopeya
La onomatopeya es la imitación lingüística oral o la representación escrita de un sonido natural, por ejemplo, de los animales como miau, pío y quiquiriquí por los gatos, pollitos y gallos, respectivamente, o de algún ruido o fenómeno acústico, o incluso visual, por ejemplo, clic o zigzag.
3.4.2.9 Formas populares y errores por analogía
A veces surgen nuevos vocablos debidos a errores intralingüísticos, como los errores por analogía. Un error de este tipo ocurre cuando alguien, de manera inconsciente, aplica una estructura de una forma existente en la lengua a otra. Por ejemplo, la -n final en la palabra *nadien, y su variante *naiden, representa un cruce analógico con las palabras alguien o quien. Asimismo, la –s final en *cercas, palabra que se usa en algunos dialectos del español, se debe a la –s final que se encuentra en su antónimo lejos. Otros ejemplos de errores por analogía son *hablastes, *comistes, *vivistes por hablaste, comiste, viviste y *acuéstensen por acuéstense. (Para más información y ejemplos de las formas populares, véase sección 5.5.1.)
¿Sabía Ud. que…?
Según la Real Academia Española, la palabra más larga en español es electroencefalografista y cuenta con un total de 23 letras. Derivada de la palabra electroencefalografía, el electroencefalografista es un profesional que estudia e interpreta los encefalogramas. Un encefalograma muestra las ondulaciones eléctricas del cerebro. ¿Puede Ud. identificar los morfemas que se encuentran en la palabra electroencefalografista? Si Ud. se da por vencido, la respuesta se encuentra al final del capítulo[4].
3.5 Prefijos
Ya como hemos aprendido, los prefijos son partículas que se sitúan antes de la raíz o lexema. Todos los prefijos forman parte de subcategorías según el significado que comunican. Algunas subcategorías de prefijos son:
- espaciales (p. ej. ante-, entre-, infra-)
- temporales (p. ej. pos-, pre-)
- aspectuales (p. ej. re-)
- negación (p. ej. a-, an-, des-, dis-, im-, in-)
- intensificación (p. ej. extra-, hiper-, super-)
- cantidad y tamaño (p. ej. bis-, mini-, multi-, pluri-)
Aprender a reconocer los prefijos más comunes en español es una excelente herramienta para crear nuevas palabras y comprender el significado que cada prefijo aporta a palabras desconocidas. En la tabla 3.2, se presenta una lista de los prefijos más comunes en español.
Prefijo |
Significado |
Ejemplos |
---|---|---|
a-, an- |
negación |
amorfo, analfabeto, anormal |
ante- |
anterioridad |
anteanoche, antecámara, antecapilla |
anti- |
contra |
antifeminista, antiniebla, antisocial |
auto- |
por uno mismo |
autobiografía, autoestima, autoinmune |
bi-, bis- |
dos veces |
bicicleta, bilabial, bisabuelo, bisnieto |
circun- |
alrededor |
circunnavegar, circunsolar, circunvecino |
co-, com-, con- |
participación con otro |
coautor, codueño, compadre, convivir |
contra- |
contra |
contradecir, contrapuesto, contraseña |
de-, des- |
privación, negación |
deformar, desconfiar, deshacer |
em-, en- |
dentro de |
embotellar, enamorar, ennegrecer |
entre- |
intermedio |
entreabrir, entresemana, entretener |
ex- |
hacia fuera, anterior |
exesposa, exhumar, extraer |
extra- |
fuera de |
extracurricular, extraordinario, extraterrestre |
hiper- |
superioridad |
hiperactivo, hipermercado, hipertenso |
hipo- |
inferioridad |
hipoglucemia, hipotenso, hipovitaminosis |
i-, im-, in- |
negación |
ilegal, imposible, inofensivo |
intra- |
dentro de, hacia dentro |
intramuros, intramuscular, intravenoso |
micro- |
pequeño |
microbús, microestructura, microonda |
mono- |
uno |
monocular, monomanía, monopatín |
pos-, post- |
posterioridad, después de |
posponer, postgrado, postparto |
pre- |
anterioridad, antes de |
prebélico, prehistoria, previsto |
pro- |
a favor de, delante |
promover, pronombre, prótesis |
re- |
repetición, de nuevo |
reclamar, rehacer, reproducir, retener |
sobre- |
exceso |
sobrenatural, sobretodo, sobrevivir |
sub- |
debajo, inferioridad |
subdelegado, subestimar, subterráneo |
super-, supra- |
con exceso, encima de |
superbién, supermercado, supraterrenal |
tele- |
a distancia |
telecomunicación, teléfono, televisión |
trans-, tras- |
al otro lado, a través de |
transatlántico, transcribir, traspasar |
ultra- |
más allá |
ultramarino, ultrasensible, ultrasonido |
3.6 Sufijos
Como ya saben, los sufijos se sitúan después de la raíz y pueden transmitir información semántica, léxica y gramatical, tal como se explica en la sección 3.9.2. En la tabla 3.3, se presenta una lista de los sufijos derivativos más comunes en español.
Sufijo |
Significado |
Ejemplos |
---|---|---|
-acho, -acha |
despectivo |
amigacho, libracho, poblacho |
-achón, -achona |
aumentativo |
bonachón, corpachón, ricachón |
-aco, -aca |
perteneciente a |
cardíaco, demoníaco, policíaco |
-ano, -ana |
gentilicio |
dominicano, mexicano, valenciano |
-ble |
posibilidad pasiva |
adorable, bebible, culpable, editable |
-bundo |
intensidad, duración |
furibundo, moribundo, vagabundo |
-cico/a, -ecico/a, -ececico/a |
diminutivo |
huevecico, piececico, puentecico, villancico |
-ción |
acción y efecto |
construcción, dirección, habitación |
-cito/a, -ecito/a, -ececito/a |
diminutivo |
cafecito, mujercita, piececito, ratoncito |
-cracia |
gobierno |
autocracia, burocracia, democracia |
-dad, -edad, -idad |
cualidad |
bondad, brevedad, sexualidad |
-dura |
acción, resultado |
cerradura, dictadura, quemadura |
-encia |
cualidad |
ausencia, deficiencia, supervivencia |
-ense |
gentilicio |
estadounidense, nicaragüense, rioplatense |
-ería |
relativo a, tienda |
cacería, librería, panadería, zapatería |
-ero, -era |
profesión |
carnicero, panadero, pescadero |
-esco, -esca |
relativo a |
novelesco, picaresco, quijotesco |
-ez |
cualidad de |
idiotez, lucidez, robustez |
-fobo, -fobia |
temor |
aracnofobia, hidrófobo, homófobo, xenofobia |
-ico |
cualidad, pertenencia |
cilíndrico, dialéctico, heroico, silábico |
-ico, -ica |
diminutivo |
hermanico, pequeñica, ratico |
-ífico, -ífica |
capaz de producir |
científico, honorífico, pacífico, terrorífico |
-illo, -illa |
diminutivo |
camilla, cigarrillo, gusanillo |
-ísimo, -ísima |
superlativo |
buenísimo, hondísimo, larguísimo |
-ista |
partidario, oficio |
artista, futbolista, periodista |
-ito, -ita |
diminutivo |
casita, pedacito, ratoncito |
-mento, -miento |
acción y efecto |
campamento, conocimiento, juramento |
-oso, -osa |
cualidad, semejanza |
ambicioso, amoroso, pegajoso |
-ote, -ota |
aumentativo, apreciativo |
amigote, grandota, papelote |
-teca |
colección |
biblioteca, discoteca, videoteca |
-tud, -itud |
cualidad |
aptitud, inquietud, juventud |
-ucho, -ucha |
despectivo |
casucha, librucho, papelucho |
-zón |
acción y efecto |
comezón, quemazón |
Los prefijos y sufijos juegan un papel muy importante en la creación de nuevas palabras. Al aprender sobre los prefijos y sufijos en español, podemos comprender mejor el significado de las palabras y su relación entre sí, ampliar nuestro vocabulario, descifrar el significado de palabras desconocidas y deletrearlas correctamente sin la necesidad de recurrir a un diccionario o a internet. Además, el conocimiento de los afijos más comunes en español nos permite deducir, cambiar y comprender el significado de las palabras que utilizamos.
3.7 La división silábica versus la segmentación morfológica
Cuando dividimos las palabras en unidades más pequeñas, seguramente estamos acostumbrados a crear segmentos que corresponden a la estructura silábica, por ejemplo, bi-blio–te–ca, cons–truc–ción o far–ma–cia. A diferencia del silabeo, la morfología opera a un nivel de análisis diferente y no se debe confundir la división silábica con la segmentación morfológica. La tabla 3.4 compara la división silábica en las palabras garabatitos, librería y zapatazo con su segmentación morfológica. Estudie la tabla, fijándose en la manera en que la segmentación morfológica se difiere de la división silábica.
Palabra |
División silábica |
Segmentación morfológica |
---|---|---|
garabatitos |
ga-ra-ba-ti-tos |
garabat-it-o-s |
librería |
li-bre-rí-a |
libr-erí-a |
zapatazo |
za-pa-ta-zo |
zapat-az-o |
3.8 Pares mínimos
Para identificar las unidades mínimas de significado en una lengua, se usa un proceso en el que se buscan pares mínimos. Morfológicamente los pares mínimos son dos o más palabras que se diferencian en un solo morfema. A veces este contraste puede ser semántico, por ejemplo, hacer frente a deshacer y rehacer, o gramatical, com–e-mos vs. com–i-mos y com-ía-mos. El contraste morfológico que afecta el significado entre dos o más palabras se conoce como el rasgo distintivo. La figura 3.14 representa esquemáticamente el concepto de un par mínimo con el rasgo distintivo señalado. El rasgo distintivo es el elemento que distingue una palabra de la otra.
Los pares mínimos demuestran una diferencia esencial entre dos o más morfemas en una lengua y por lo tanto señalan distinciones fundamentales en la creación e interpretación del significado de las palabras. En la tabla 3.5, se presentan varios pares mínimos formados a base del lexema pon–. Cuando –poner se encuentra al final de una forma verbal, se traduce al sufijo –pose en inglés en palabras como componer ‘compose’, disponer ‘dispose’, oponer ‘oppose’, reponer ‘repose’, suponer ‘suppose’, y. Nótese que los prefijos com-, dis-, o-, re– y su– sirven para cambiar el significado de las palabras.
Prefijo |
Lexema |
Sufijo flexivo |
Sufijo flexivo |
Resultado |
Traducción al inglés |
---|---|---|---|---|---|
Ø |
pon |
e |
r |
poner |
place/put |
com |
pon |
e |
r |
componer |
compose |
dis |
pon |
e |
r |
disponer |
dispose |
o |
pon |
e |
r |
oponer |
oppose |
re |
pon |
e |
r |
reponer |
repose |
su |
pon |
e |
r |
suponer |
suppose |
También, es importante notar que la ausencia de un morfema, conocido como el morfo cero, es tan significativo como la presencia de él. Por ejemplo, si eliminamos el prefijo re- en la palabra reponer, nos quedamos con un morfo cero antes del lexema: Ø + poner. La ausencia del prefijo re- delante de la palabra poner es significativo. Igualmente, las marcas de persona en las conjugaciones verbales para la primera y tercera persona del singular, 1S y 3S, respectivamente, pueden ser consideradas como morfos ceros, representadas en un análisis morfológico como Ø. Véanse los ejemplos de verbos conjugados en el presente indicativo en la tabla 3.6.
habl
habl habl habl habl |
o
a a a a |
Ø
s Ø mos n |
com
com com com com |
o
e e e e |
Ø
s Ø mos n |
viv
viv viv viv viv |
o
e e i e |
Ø
s Ø mos n |
Exploremos
En grupos de tres o cuatro estudiantes, analicen críticamente el tuit de la Real Academia Española sobre el lenguaje inclusivo que aparece en la figura 3.15. Lean el tuit y tomen apuntes. Luego, investiguen el tema del lenguaje inclusivo en español utilizando diferentes fuentes en internet. Identifiquen argumentos a favor y en contra y organicen un debate en clase. Presenten sus puntos de vista de manera respetuosa y escuchen a sus compañeros. Al final, reflexionen sobre su comprensión y participación en el debate. Concluyan con una discusión sobre las implicaciones del lenguaje inclusivo. ¿Están de acuerdo o en desacuerdo con las afirmaciones de la Real Academia Española? ¿Por qué? ¿Creen Uds. que el uso del lenguaje inclusivo será muy común en el futuro?
3.9 Tipos de morfemas
En el análisis morfológico de una lengua, se distinguen morfemas libres y ligados, que difieren en su capacidad de existir independientemente o unidos a otros elementos. También se estudian los morfemas flexivos y derivativos, que desempeñan funciones específicas en la formación de palabras y en la expresión de categorías gramaticales. La siguiente sección explora en detalle estos conceptos y su relevancia en la formación y flexión de palabras.
3.9.1 Morfemas libres y ligados
En la lingüística, hay dos tipos de morfemas que se clasifican de acuerdo con su grado de dependencia: morfemas libres y ligados. Los morfemas libres, también llamados independientes, son aquellos que constan de un morfema léxico solamente como flor, luz, mar, mujer, papel o reloj. Siendo morfemas independientes, no necesitan unirse a otro morfema ya que forman por sí solo una palabra con su propio significado. Otros ejemplos de morfemas libres son los adverbios ayer, hoy, nunca, siempre, las preposiciones a, ante, con, contra, de, en, para, por, y las conjunciones y/e, o/u, aunque, mas, pero, sino.
A continuación, se presenta una lista de ejemplos de morfemas libres en español. ¿Puede usted contribuir con algunos más a esta lista?
azul
carácter entonces entre |
flor
lugar luz mar |
mujer
nunca ojalá pan |
papel
por reloj sal (n.) |
sartén
siempre sol tapiz |
A diferencia de los morfemas libres, los morfemas ligados o trabados, son aquellos que necesitan unirse a otros morfemas para formar una palabra completa. Los morfemas ligados pueden ser prefijos (p. ej. anti–climático, hiper–mercado, sub–marino, ) o sufijos (p. ej. zapat–er–o, carr–it–o, libr–uch–o). Nótese que los morfemas ligados pueden dividirse en dos tipos o categorías —morfemas flexivos y morfemas derivativos—, o sea, los que comunican información gramatical (p. ej. –a (género), –s (número), –mos (persona-número), –ba (aspecto)) o información léxica o semántica, (p. ej. –al, anti-, –ción, re-, –tad), respectivamente. Se presentará más información sobre los morfemas flexivos y derivativos a continuación.
3.9.2 Morfemas flexivos y derivativos
Los morfemas flexivos que se usan para comunicar información gramatical, por ejemplo, género (masculino o femenino, p. ej. chico, chica), número (singular o plural, p. ej. perro, gatos, rubí, rubíes), persona-número (primera, segunda o tercera persona, singular o plural, p. ej. hablo, hablas, habla), tiempo (presente o pasado, p. ej. hablo, hablé, hablaré), modo (indicativo o subjuntivo, p. ej. hable, coma, viva) y aspecto (acciones completas e incompletas, p. ej. estudié vs. estudiaba). Es mediante los morfemas flexivos que se crean variantes gramaticales de una misma palabra, tal como en las palabras bonito/a, casa/casas; hablé/hable que varían en términos de género, número y modo, respectivamente.
En español, los morfemas flexivos son muy regulares. Esto significa que son consistentes en las formas que pueden tomar. Por ejemplo, las terminaciones verbales son las mismas para todos los verbos en la lengua a pesar de que sean numerosas. Lo mismo ocurre con los morfemas que distinguen entre género, número, modo y aspecto.
Los morfemas flexivos siempre son sufijos ya que se sitúan después de la raíz. Nunca pueden ser prefijos y jamás cambian la categoría gramatical de la palabra. La información gramatical que comunican los morfemas flexivos varía dependiendo de la categoría gramatical a la que pertenece la palabra, sea sustantivo, verbo, adjetivo o adverbio. La tabla 3.8 proporciona el tipo de información gramatical que se comunica mediante los morfemas flexivos en español con algunos ejemplos.
Morfemas flexivos |
Ejemplos |
|
---|---|---|
Género |
|
|
Número |
|
|
Persona-número |
|
|
Tiempo: Presente o pasado |
Presente:
|
Pasado:
|
Modo: Indicativo o subjuntivo |
|
|
Aspecto: Perfectivo o imperfectivo (acción completa o incompleta, respectivamente) |
|
|
Infinitivo y la vocal temática |
|
|
Participio progresivo |
|
|
Participio pasado |
|
Por otro lado, tenemos la morfología léxica o derivativa, que estudia la estructura de las palabras teniendo en cuenta las pautas que permiten construir nuevas palabras y los segmentos individuales que se pueden aislar en la construcción de ellas. En la morfología derivativa tenemos una base o raíz léxica que comunica el significado de la palabra, y mediante el proceso de la afijación, se colocan afijos antes o después del lexema. Los morfemas derivativos tienen la capacidad de cambiar el significado de la palabra, por ejemplo, constitución a anticonstitucional, y son capaces de cambiar la categoría gramatical, como convertir un verbo a un sustantivo: construir > construcción, o un sustantivo a un adjetivo: barba > barbudo, región > regional.
La tabla 3.9 muestra los procedimientos más comunes en la creación de nuevas palabras usando los morfemas derivativos en español.
Sustantivos derivados de verbos |
||
---|---|---|
Sustantivos derivados de adjetivos |
||
|
-ada |
abofetear > bofetada |
|
-aje |
aterrizar > aterrizaje |
|
-ción |
grabar > grabación; introducir > introducción |
|
-dura |
salpicar > salpicadura |
|
-dad/-tad |
humilde > humildad; leal > lealtad; malo > maldad |
|
-edad |
vario > variedad |
|
-idad |
actual > actualidad |
Sustantivos que indican profesiones |
||
|
-dor |
pescador, trabajador |
|
-ero |
panadero, pastelero, zapatero |
|
-ista |
artista, dentista, oculista |
Sustantivos que indican conjuntos, agrupaciones o comercios |
||
|
-ado |
alumnado, profesorado |
|
-ario |
partidario, vecindario |
|
-ería |
librería, pescadería, zapatería |
|
-ero (árboles) |
albaricoquero, limonero, melocotonero |
|
-ero (lugar) |
basurero, hormiguero |
|
-ía |
ciudadanía |
La figura 3.16 ilustra las diferencias sobresalientes entre los morfemas derivativos y flexivos en español.
3.10 Alomorfos
A veces el mismo morfema puede tener varias formas diferentes. Las variantes del mismo morfema se conocen como alomorfos. Un alomorfo se define como una o más realizaciones diferentes del mismo morfema. Si consideramos el verbo morir, vemos que tiene formas diferentes como muere, murió y morimos. Nótese que cada raíz en estas palabras, muer– mur– y mor–, respectivamente, es diferente pero que todas estas variantes comunican la misma idea: la de dejar de vivir.
El sistema verbal del español es muy variado, con muchas raíces y formas diferentes. La mayoría de los verbos tienen una sola raíz, como bailar > bail-, barrer > barr– y vivir > viv-. Sin embargo, hay una subcategoría de verbos que experimenta cambios vocálicos, lo que resulta en una gran diversidad de raíces. Por ejemplo, el verbo querer tiene dos raíces diferentes en la formación del presente de indicativo: quier– y quer-. Esto se ve en formas como quiero y queremos. En el pretérito de indicativo, el verbo querer se conjuga con un lexema diferente, quis– (p. ej. quis-e, quis-iste, quis-o, etc.). Esta variación que vemos en el mismo morfema se conoce como la alomorfía. En la tabla 3.10 se encuentran ejemplos de algunos verbos que cambian de radical. (OJO: Los cambios ocurren en todas las formas menos las de nosotros y vosotros.)
Infinitivo | Cambio | Forma verbal | Infinitivo | Cambio | Forma verbal |
---|---|---|---|---|---|
acostarse | o > ue | acuesto | poder | o > ue | puedo |
cerrar | e > ie | cierro | pedir | e > i | pido |
comenzar | e > ie | comienzo | pensar | e > ie | pienso |
competir | e > i | compito | perder | e > ie | pierdo |
contar | o > ue | cuento | preferir | e > ie | prefiero |
costar | o > ue | cuesto | probar | o > ue | pruebo |
decir | e > i | dice | querer | e > ie | quiero |
divertirse | e > ie | divierto | repetir | e > i | repito |
dormir | o > ue | duermo | requerir | e > ie | requiero |
morir | o > ue | muero | soñar | o > ue | sueño |
Los alomorfos abundan en la lengua española y no se limitan solamente a raíces verbales. A veces los alomorfos son el resultado del contexto fonológico en el que se encuentran y se conocen como alomorfos fonológicamente condicionados. Considere los ejemplos de alomorfos negativos que se encuentran en la tabla 3.11.
Prefijo negativo | Lexema | Resultado |
---|---|---|
a-
an- des- dis- i-
im- in-
|
normal
alfabeto empleado gusto legítimo reparable posible agotable separable |
anormal
analfabeto desempleado disgusto ilegítimo irreparable imposible inagotable inseparable |
Todos los prefijos que se encuentran en la tabla se usan para formar palabras negativas en español. El prefijo in- se usa para negar palabras como in–agotable o in-separable. Cuando el prefijo in- se encuentra antes de las consonantes b y p, el prefijo cambia a im- ortográficamente, en palabras como im–batible, im–posible o im–probable. Obsérvese que no se efectúa este cambio cuando in- viene antes de una raíz que empieza v- ortográfica en palabras como in–vencible o in–visible. (Para más información, véase la guía de ortografía que se encuentra en el capítulo 2.)
El prefijo negativo in- también cambia a i- delante de los grafemas l- y r-, en palabras como ilegal, ilegítimo; irreconciliable, irreparable, irresponsable. Nótese, además, que la letra r cambia a rr para representar la vibrante múltiple /r/. (Véase capitulo 2.) Además del prefijo negativo in- y sus alomorfos, existen otros prefijos que se usan en la formación de palabras negativas, como a– en anormal, an– en analfabeto, des– en desempleado y dis- en disgusto. Se dice que todos estos alomorfos negativos en español ocurren con una distribución complementaria ya que su uso puede predecirse por el contexto en que se encuentran y son mutuamente excluyentes. Esto quiere decir que en el contexto en el que ocurre uno, no puede ocurrir el otro y que no son formas intercambiables. Por ejemplo, la palabra irresponsable existe, pero las palabras *arresponsable o *disresponsable no se consideran gramaticalmente correctas.
Se debe tener en cuenta que no todos los alomorfos presentan una distribución complementaria. En español, existen unos pocos prefijos que se utilizan con variación libre. En lingüística, esta variación libre sucede cuando dos o más formas pueden emplearse en el mismo contexto sin alterar el significado de la palabra y sin ser consideradas incorrectas por los hablantes nativos.
Por ejemplo, en algunos dialectos del español, los prefijos tras- y trans– se usan indistintamente, y por consiguiente, se puede oír las palabras trascurrir o trasatlántico por transcurrir o transatlántico, respectivamente. Otro ejemplo es el prefijo os– y su variante obs-. Por ende, se puede decir oscuro, oscurecer, oscuridad por obscuro, obscurecer y obscuridad, respectivamente. Nótese que el prefijo os- es más común en los diferentes dialectos del español.
Quilter (1993) nota que muchos lexemas en español tienen alomorfos. Aparte de los lexemas verbales que experimentan un cambio vocálico que ya discutimos, como e > i, e > ie, o > ue, etc., hay muchas raíces que sufren una alternancia consonántica. Esta alternancia de consonantes en lexemas se debe mayormente a la evolución de estas palabras desde el latín al español como leche y lácteo, llama e inflamar o llano y plano. Estos tipos de palabras se conocen como dobletes léxicos (véase capítulo 1). Como hemos visto, los dobletes léxicos en español son pares de palabras que tienen un origen común en un étimo latino y han evolucionado de manera diferente a lo largo del tiempo, dando lugar a una forma patrimonial y una forma culta. Considere la relación semántica entre los siguientes pares de palabras a continuación. Primero, trate de adivinar la relación etimológica entre las parejas de palabras que se dan. Si se da por vencido, búsquelas en un diccionario o en internet para averiguar cómo se relacionan etimológicamente.
abertura/apertura
año/anual hembra/femenino |
hambre/famélico
hoja/follaje llave/clave |
lleno/pleno
lluvioso/pluvioso noche/nocturno |
Resumen
En este capítulo, aprendimos que las palabras son un componente importante del lenguaje. Dependiendo del tipo de información que comunican, las palabras pertenecen a dos categorías importantes: léxicas y funcionales. Las palabras léxicas comunican información semántica como luz, sol y mujer, mientras que las funcionales comunican información gramatical y constan de artículos definidos, adjetivos demostrativos, adjetivos posesivos, preposiciones y conjunciones. Las palabras funcionales forman parte de la categoría cerrada de palabras en el sentido de que nunca se les agregan nuevas palabras. En cambio, las palabras léxicas pertenecen a la categoría abierta porque pueden adquirir nuevas palabras con tal que haya una necesidad. Se pueden agregar nuevas palabras a una lengua mediante procesos tanto externos como internos. Los procedimientos externos pueden consistir en préstamos de otra lengua, mientras que los procedimientos internos consisten en la flexión, composición, truncamiento, epónimo propietario, acronimia, siglación y onomatopeya.
La morfología (del griego morphe ‘forma’ y logos ‘tratado’) estudia la estructura de las palabras. El morfema se define como una unidad mínima significativa de una palabra. Hay varios tipos de morfemas en una lengua. Los morfemas libres son palabras autónomas que no requieren unirse a otros morfemas para ser utilizadas, mientras que los morfemas ligados solo se utilizan en conexión con otros morfemas. El morfema básico de una palabra es el lexema. A los lexemas se les puede agregar otros morfemas, llamados afijos. Los afijos que se sitúan antes de la raíz se conocen como prefijos mientras que los que vienen después son sufijos. Los morfemas también se distinguen dependiendo del tipo de información que comunican. Los morfemas flexivos comunican información gramatical, mientras que los morfemas derivativos comunican información léxica o semántica.
Los lingüistas usan un proceso de buscar pares mínimos para determinar distinciones fundamentales en la interpretación del significado de los morfemas en las palabras. Un par mínimo es un par de palabras que difieren únicamente en un solo aspecto. Esta diferencia se conoce como el rasgo distintivo. A veces el mismo morfema puede tener diferentes formas, llamadas alomorfos, que comunican la misma información, por ejemplo, im- vs. i-, como en imposible frente a irresponsable. Un alomorfo se define como una o más variantes del mismo morfema. Los alomorfos en español suelen ocurrir con una distribución complementaria; lo cual quiere decir que en el contexto en el que ocurre uno, no puede ocurrir el otro y que no son formas intercambiables. A veces hay alomorfos con una variación libre que pueden usarse indistintamente, como tras- y trans-, sin cambiar el significado de las palabras y que no se consideran incorrectos.
El aprendizaje de la morfología nos ayuda a comprender mejor el significado de las palabras y la relación entre ellas. También nos ayuda a ampliar nuestro vocabulario, a descifrar el significado de palabras desconocidas y a deletrear bien las palabras sin tener que consultar un diccionario o buscarlas en el internet.
Lista de términos útiles
acortamiento (truncamiento)
acronimia afijo alomorfía alomorfo aspecto calco léxico categoría abierta categoría cerrada composición derivación distribución complementaria doblete léxico eponimia epónimo propietario error por analogía extranjerismo adaptado extranjerismo no adaptado extranjerismo flexión género lenguaje inclusivo lexema (raíz) modo |
morfema
morfema derivativo morfema flexivo morfema libre morfema ligado morfo cero morfología número onomatopeya palabra palabra funcional palabra léxica par mínimo persona-número prefijo préstamo procedimiento externo procedimiento interno rasgo distintivo sigla siglación sufijo tiempo variación libre xenismo |
Práctica
A. Definiciones. Escriba una definición para cada uno de los términos que se proveen a continuación e incluya un ejemplo cuando sea posible.
- alomorfo
- calco léxico
- epónimo propietario
- lexema
- morfema
- morfema derivativo
- morfema flexivo
- morfología
- onomatopeya
- palabra funcional
- palabra léxica
- prefijo
- préstamo no adaptado
- siglación
- sufijo
B. Lexemas. Identifique el lexema (la raíz) de las palabras a continuación.
- mujeres
- suciedad
- atar
- insolación
- querer
- zapatería
- añorado
- salir
- amoroso
- cantante
- carnicería
- envoltura
- hablador
- cercano
- descubrir
- impredecible
- sombrero
- conocimiento
C. Alomorfía verbal. Escriba todos los lexemas para los siguientes verbos según los modelos.
- MODELOS:
- preferir → prefer-, prefier-, prefir-
- estar → est-, estuv-
- bailar
- poder
- tener
- andar
- querer
- poner
- dormir
- venir
- valer
- salir
- hacer
D. El parentesco entre palabras.
Paso 1. Divida las siguientes palabras según su segmentación morfológica.
- MODELO: alegre / alegría / alegramos → alegr-e; alegr-ía; alegr-a-mos
- hispano / hispánico / hispanista
- cariñoso / cariño / acariciar
- inmigrar / inmigrante / inmigración
- amor / amoroso / amorío / enamorar
Paso 2. Ahora, haga una lista de palabras relacionadas para cada palabra a continuación. Separe los morfemas que las componen, como en el modelo. También puede indicar qué tipo de morfema es y el proceso en la formación de cada una.
- MODELO: casa → cas-it-a, cas-ot-a, cas-uch-a, cas-er-o, cas-er-ón
- lengua
- zapato
- libro
- cuchillo
- grande
- chico
- mujer
- carne
- pan
- puerta
E. ¿Qué tipo de palabra es? Indique Ud. a qué categoría pertenecen las palabras en la lista de abajo según su proceso de formación. Si Ud. no sabe la palabra o si se da por vencido, se puede hacer una investigación en internet.
- acortamiento
- acrónimo
- epónimo propietario
- onomatopeya
- palabra compuesta
- sigla
- sigla y acrónimo
- baloncesto
- boli
- cabizbajo
- FIFA
- autobús
- IVA
- Kleenex
- matamoscas
- NASA
- ONG
- tele
- portaviones
- radar
- ronronear
- tictac
- uni
- UNICEF
- Velcro
- cantautor
- zumbar
F. Diminutivos. Hay muchas formas diminutivas en español que se forman usando mayormente los sufjos –ito/-ita o –ecito/-ecita. También hay palabras que usan –illo/-illa y –ecillo/-ecilla en la formación del diminutivo. Trate de dar la forma del diminutivo de las siguientes palabras, como en los modelos. Se puede usar el diccionario o el internet.
- MODELOS:
- café → cafecito
- perro → perrito
- hermana → hermanita
- pan
- libro
- mesa
- ventana
- vaso
- mamá
- cerveza
- calle
- coche
- sombrero
- abuela
- pobre
G. Palabras compuestas. Clasifique cada palabra según los elementos que la componen (sustantivo + sustantivo, verbo + sustantivo, etc.). Luego, escriba otras palabras formadas según cada modelo.
- montaña rusa
- ama de casa
- guardaespaldas
- claroscuro
- medianoche
- camposanto
- carilargo
- paracaídas
- nochevieja
- subibaja
- bocacalle
- malestar
Apliquemos
La morfología y la medicina
¿Sabe Ud. que no es necesario ser médico para poder entender la terminología médica? Si tenemos un buen conocimiento de la morfología y si sabemos el significado de los prefijos, sufijos y las raíces, no solamente podemos descifrar el significado de algunos términos médicos, sino que también podemos traducirlos correctamente de una lengua a otra.
¿Puede Ud. adivinar lo que significan las siguientes palabras basándose en los prefijos, sufijos y raíces que se encuentran. Se puede usar el diccionario o el internet.
adipocito
bacteriostasis cardiólogo encefalografía esclerodermia farmacéutico hemostasia hipodérmico histerectomía |
osteomielitis
osteoporosis pulmonía pulpectomía queratinocito retro ocular rinofaringitis rinoplastia |
Ahora bien, haga una lista de todos los prefijos, sufijos y raíces que encontró en las palabras que acaba de analizar. ¿Puede Ud. pensar en más morfemas que se podrían añadir a la lista? ¿En qué situaciones cree Ud. que el conocimiento de los morfemas le puede ayudar en su vida personal o profesional?
Referencias
Azevedo, Milton M. 2009. Introducción a la lingüística española. 3ª ed. Upper Saddle River, NJ: Prentice Hall.
Bowers, Peter N. y John R. Kirby. 2010. “Effects of Morphological Instruction on Vocabulary Acquisition”. Reading and Writing 23(5): 515-537. http://dx.doi.org.ezproxy.uta.edu/10.1007/s11145-009-9172-z.
Díaz-Campos, Manuel, Kimberly L. Gesslin y Laura Gurzynski-Weiss. 2018. Introducción y aplicaciones contextualizadas a la lingüística hispánica. Malden, MA: Wiley-Blackwell.
DLE. Real Academia Española. Diccionario de la lengua española. 23ª ed. https://dle.rae.es.
DPD. Real Academia Española y Asociación de Academias de la Lengua Espanola. Diccionario panhispánico de dudas. https://www.rae.es/dpd.
Hualde, José Ignacio, Antxon Olarrea, Anna María Escobar, Catherine E. Travis y Cristina Sanz. 2021. Introducción a la lingüística hispánica. 3ª ed. Cambridge: Cambridge University Press.
Muñoz-Basols, Javier, Nina Moreno, Inma Taboada y Manel Lacorte. 2017. Introducción a la lingüística hispánica actual: teoría y práctica. Londres: Routledge.
National Geographic en Español. 2019. “Estas son las nuevas palabras que se agregaron a la RAE”. National Geographic en Español, noviembre 8, 2019. https://www.ngenespanol.com/el-mundo/nuevas-palabras-agregaron-a-la-rae/.
NGLE. Real Academia Española y Asociación de Academias de la Lengua Espanola. Nueva gramática de la lengua española. https://www.rae.es/gramática.
ODP. Real Academia Española. Observatorio de palabras. https://www.rae.es/portal-linguistico/observatorio-de-palabras.
Quilter, Daniel Edward. 1993. Spanish Analysis for Advanced Students. Nueva York: McGraw-Hill.
Wheatley, Kathleen. 2005. Sintaxis y morfología de la lengua española. Upper Saddle River, NJ: Pearson.
Yule, George. 2020. The Study of Language. 7ª ed. Cambridge: Cambridge University Press.
Figuras y créditos
Figura 3.1 La Real Academia Española en Madrid, España
- Real Academia de la Lengua Española-Madrid de Federico Jordá, licenciada bajo CC BY-SA 2.0
Figura 3.2 Un tuit de la Real Academia Española sobre el uso del pronombre elle en su Diccionario de la lengua española
- Tuit de la Real Academia Española, utilizado bajo uso justo (fair use)
Figura 3.3 Un letrero que explica el uso del lenguaje inclusivo en una protesta feminista en Madrid, España
- Lenguaje inclusivo de Brocco Lee, licenciada bajo CC BY-SA 2.0
Figura 3.4 Construcción de palabras con el lexema gat– y sus morfemas flexivos
- Flexión de gato de David Vignoni, licenciada bajo GNU Library General Public License
Figura 3.5 Morfemas derivados y flexivos en la palabra gatitas en español
- Kittens de Mathias Erhart, licenciada bajo CC BY-SA 2.0
- “Análisis morfológico” de A. Raymond Elliott, licenciada bajo CC BY-NC 4.0
Figura 3.6 Estructura básica de una palabra
- “Estructura básica de una palabra” de A. Raymond Elliott, licenciada bajo CC BY-NC 4.0
Figura 3.7 Un tuit de la Real Academia Española sobre la pronunciación del italianismo pizza
- Tuit de la Real Academia Española, utilizado bajo uso justo (fair use)
Figura 3.8 Hot dogs y hamburguesas como ejemplos de extranjerismos no adaptados y adaptados
- Venta de carritos de hot dog Obregón, Sonora en una publicación en Facebook, utilizada bajo uso justo (fair use)
Figura 3.9 Mural de la entrada al Jardín de Niños Vasco de Quiroga ubicado en Altepexi, Puebla, México
- Kinder Vasco de Quiroga en Altepexi, licenciada bajo CC BY-SA 3.0
Figura 3.10 Procesos externos e internos en la creación de palabras
- “Procesos externos e internos en la creación de palabras” de A. Raymond Elliott, licenciada bajo CC BY-NC 4.0
Figura 3.11 Ejemplos de productos epónimos propietarios en español
- “Yogur Danone” de A. Raymond Elliott, licenciada bajo CC BY-NC 4.0
- “Pan Bimbo en México” de A. Raymond Elliott, licenciada bajo CC BY-NC 4.0
- “Chocomilk” de A. Raymond Elliott, licenciada bajo CC BY-NC 4.0
Figura 3.12 El Metrobús de la Ciudad de México
- Metrobús de CDMX del Gobierno CDMX, licenciada bajo CC0 1.0
Figura 3.13 Un tuit de la RAE sobre la palabra más larga que se encuentra en el Diccionario de la lengua española (DLE)
- Tuit de la Real Academia Española, utilizado bajo uso justo (fair use)
Figura 3.14 Representación gráfica de un par mínimo y su rasgo distintivo
- “Representación gráfica de un par mínimo y su rasgo distintivo” de A. Raymond Elliott, licenciada bajo CC BY-NC 4.0
Figura 3.15 Un tuit de la RAE sobre el lenguaje inclusivo
- Tuit de la Real Academia Española, utilizado bajo uso justo (fair use)
Figura 3.16 Un diagrama de flujo que muestra la diferencia entre los morfemas derivativos y flexivos
- “Un diagrama de flujo que muestra la diferencia entre los morfemas derivativos y flexivos” de A. Raymond Elliott, licenciada bajo CC BY-NC 4.0
Figura 3.17 Un tuit sobre Mafalda, una tira cómica popular leída en toda América Latina y el mundo de habla hispana
- Tuit de LOLA MARina NATURE Defender @1olamarina, utilizado bajo uso justo (fair use)
Figura 3.18 Representación médica de órganos internos humanos con el hígado resaltado
- Liver location de BruceBlaus, licenciada bajo CC BY 3.0
- Según la RAE (ODP), “La grafía googlear es un híbrido formado a partir del nombre inglés Google y la terminación española -ear. Es preferible usar la adaptación gráfica guglear. Aun así, hoy en día sigue siendo más común la construcción buscar en Google”. A pesar de que la RAE no haya aceptado oficialmente la palabra googlear, esta aparece más de 1.930.000 veces en internet. ↵
- En latín, el caso acusativo se utiliza para marcar el complemento directo de un verbo transitivo. Por ejemplo, en la frase amicus librum legit ('El amigo lee el libro.'), librum está en caso acusativo, indicando que es el objeto directo del verbo legit. En latín, el caso acusativo siempre termina en -m para sustantivos en forma singular. ↵
- El Metrobús de la Ciudad de México (antiguo nombre oficial Sistema de Corredores de Transporte Público de Pasajeros del Distrito Federal), conocido simplemente como Metrobús, es un sistema de autobuses de tránsito rápido que ha servido a la Ciudad de México desde que se inauguró la línea 1 el 19 de junio de 2005. ↵
- La palabra electroencefalografista tiene un total de ocho morfemas: electr-o-en-cefal-o-graf-ist-a. ↵
unidad lingüística, dotada generalmente de significado, que se separa de las demás mediante pausas potenciales en la pronunciación y blancos en la escritura
palabra que comunica un significado definido, como los sustantivos, los adjetivos, los verbos y los adverbios
conjunto de palabras en una lengua que tienen la capacidad de crecer y admitir la incorporación de palabras nuevas
palabra que comunica información gramatical, como los pronombres, los determinantes, las preposiciones y las conjunciones
conjunto de palabras en una lengua que no admiten la creación de otras palabras nuevas
forma de comunicación que busca evitar la discriminación o exclusión de ciertos grupos por su género, orientación sexual, identidad cultural, capacidades físicas o edad
rama de la lingüística que estudia la estructura de las palabras de una lengua, además de los procedimientos involucrados en la formación de palabras
unidad mínima de significado que se encuentra en una palabra
véase lexema
morfema que se agrega a una raíz, ya sea al principio (prefijo) o al final (sufijo) de la misma, con el propósito de modificar su significado o su función gramatical
morfema que se añade al principio de una raíz para modificar su significado
morfema que se agrega al final de una raíz para modificar su significado o función, en ocasiones cambiando también su categoría gramatical
proceso por el cual una lengua incorpora palabras de otra lengua debido a influencias externas, como la migración, el comercio, la cultura o la globalización
palabra tomada de una lengua e incorporada en otra
palabra o expresión tomada de una lengua extranjera e incorporada en otra (sinónimo de préstamo)
préstamo que no se ajusta al sistema fonológico, morfológico u ortográfico de la lengua receptora
tipo de extranjerismo no adaptado que hace referencia a una realidad ajena a la lengua y a la comunidad receptora, que es incapaz de encontrar un equivalente
préstamo que se ajusta al sistema fonológico, morfológico y ortográfico de la lengua receptora
1. préstamo de otra lengua mediante la traducción literal o como copia de la estructura de una palabra o expresión en la lengua original (sinónimo de calco léxico); 2. adopción de un significado extranjero para una palabra ya existente en una lengua (sinónimo de calco semántico)
proceso por el cual una lengua forma palabra y que consiste en cambios morfológicos de la propia lengua
procedimiento de formación de palabras mediante variación de género, número, persona, tiempo, modo o aspecto, entre otros, con el fin de expresar diferentes contenidos gramaticales
procedimiento de formación de palabras mediante la adición de prefijos o sufijos a una raíz
procedimiento de formación de palabras mediante el cual se combinan dos o más palabras
procedimiento de formación de palabras mediante el cual se eliminan sílabas de una palabra, normalmente al final
véase acortamiento
procedimiento de formación de palabras a partir de otro nombre
sustantivo común, creado a partir de un nombre propio, que nombra un objeto o concepto específico asociado con el nombre comercial o la marca registrada de un producto
procedimiento de formación de palabras mediante abreviaciones gráficas formadas por las letras iniciales de una expresión compleja
abreviación gráfica formada por las letras iniciales de una expresión compleja
procedimiento de formación de palabras mediante el cual se crean vocablos por la unión de elementos de dos o más palabras, constituido por el principio de la primera y el final de la última, o por la combinación de letras iniciales de palabras cuya configuración permite su pronunciación como una sola palabra
procedimiento de formación de palabras por imitación del ruido o del sonido del objeto o fenómeno al que se refieren
error lingüístico que resulta al aplicar una estructura de una palabra existente a otra palabra de manera no prescriptiva, creando una nueva forma
1. dos palabras que difieren en un solo fonema y tienen significados diferentes; 2. dos palabras que difieren en un solo morfema y tienen significados diferentes
característica fonética, morfológica o gramatical específica que marca la diferencia entre dos o más elementos de una lengua y que cambia su significado
morfema sin realización fonética que se opone a otros que se realizan fonéticamente
morfema que puede existir por sí solo y forma una palabra independiente
afijo que no puede existir como una palabra independiente y que necesita estar unido a otro morfema
sufijo que comunica información gramatical de una palabra, como género, número, tiempo, modo y aspecto, y que no es capaz de cambiar su categoría gramatical
morfema que cambia el significado de una palabra y que es capaz de cambiar su categoría gramatical
categoría gramatical que se utiliza para clasificar los sustantivos como masculinos o femeninos y que se manifiesta en la concordancia con otros elementos gramaticales, como los artículos y los adjetivos
categoría gramatical que indica si un sustantivo, pronombre o verbo está en singular (se refiere a una sola entidad) o en plural (se refiere a más de una entidad)
categoría gramatical que se refiere a los participantes implicados en el acto comunicativo: la persona que habla (primera persona), la persona a quien se habla (segunda persona) y la persona sobre quien se habla (tercera persona), además si se implica un participante (singular) o más de uno (plural)
categoría gramatical que indica si la acción verbal se relaciona con el presente o con el pasado
categoría gramatical que indica la actitud del hablante hacia la acción verbal y su relación con la realidad, entre otros valores
categoría gramatical que exprea cómo se concibe la duración y finalización de la acción verbal: el aspecto perfectivo (acción terminada) vs. el aspecto imperfectivo (acción no terminada)
realización o variante un morfema
existencia del conjunto de variantes de un morfema
relación entre dos o más elementos fonéticos o morfológicos en la cual cada elemento aparece en un contexto particular, y se excluye la posibilidad de que dicho elemento aparezca en otro contexto
fenómeno lingüístico que ocurre cuando dos o más formas pueden emplearse en el mismo contexto sin alterar el significado
dos palabras con un mismo origen etimológico (en el caso del español, del latín), una de transmisión patrimonial y otra de transmisión culta